Los aficionados que visitarán el Wörthersee 2007 en Austria, se darán el gusto privilegiado de saber porque Volkswagen ha subido su galardón a un nivel inalcansable con esta "bomba pintada de blanco". El Golf GTI W12 650, sin necesidad de explicarlo mucho, es nada más y nada menos que el GTI para acabar con todos los demás que hayan sacado otras marcas, porque evidencia una velocidad tope de 325 km/h (202 mph) y acelera de 0 a 100 km/h en 3,7 escalofriantes segundos.
Evidentemente se trata de un exquisito show car, así que no salgan corriendo en dirección a la agencia con un fajo de billetes en cada mano. Monta aros de 19" con llantas 295 atrás y 235 adelante. Una lástima verdad, porque esta bestia lleva tras sus asientos un monstruoso motor trasero de 6,0 litros, W12, 12 cilíndros biturbo, de 650 caballos y 750 Nm, asociado a un cambio automático de seis velocidades que trata de controlar como sea a las ruedas traseras. Hay que saberlo manejar incluso... La carrocería del GTI W12 650, es más baja y ancha que la de un GTI normal, retiene las puertas, la tapa de motor y las luces de serie genuinas, pero todo lo demás es completamente nuevo, incluyendo las entradas de aire por las que inspira el motor y hasta luce una parrilla distinta inusual en los Volkswagens de esta generación. Una de sus curiosidades es que VW no ha querido emplear un enorme alerón trasero para mejorar la adherencia, optando en su lugar por crear un techo especial de fibra de carbono que actúa como un eficientee difusor, enviando aire al pequeño spoiler que hay en su extremo posterior.
A simple vista hasta da miedo. No tanto como el que posiblemente sentiríamos al volante de él, pero asusta de todas formas. Y pensar que seguramente alguien ya le ha dado una vueltita mientras el resto nos conformamos con mirarlo en este reportaje...
1 comentario:
joerrr vaya pedazo bestia sobre ruedas
madre mia montarse en uno de esos
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